Dimensión: 1.5.2: Gestión de recursos humanos

Esta dimensión se refiere a los recursos humanos necesarios para apoyar un parlamento eficaz. Solo incluye al personal no partidista bajo la dirección de la administración parlamentaria, no al personal político que apoya a los parlamentarios y sectores políticos individuales.

La gestión de los recursos humanos incluye el fortalecimiento de la capacidad institucional para lograr un desempeño sostenido y mejorado. Por lo tanto, el desarrollo y la capacitación integrales del personal son importantes para que la administración parlamentaria pueda satisfacer las necesidades del parlamento a largo plazo.

En algunos países, se permite que el personal se mueva entre la administración pública y la parlamentaria. El marco legal puede establecer que el personal parlamentario sea empleado de todo el gobierno a los efectos de la jubilación y otros beneficios relacionados.

Véase también Dimensión 1.1.4: Autonomía administrativa, Indicador 2.2: Integridad institucional e Indicador 5.2: Prácticas institucionales inclusivas.

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Objetivo deseado

Basado en un análisis comparativo mundial, el objetivo al que aspiran los parlamentos en el ámbito de la “gestión de recursos humanos” es el siguiente:

La administración parlamentaria dispone de recursos humanos suficientes para poder cumplir su mandato.

Existen procesos y procedimientos establecidos para la planificación, asignación y evaluación del personal necesario para apoyar la labor parlamentaria.

Los siguientes principios son aplicados a la contratación y promoción del personal parlamentario:

  • El personal parlamentario debe ser contratado y promovido a través de una competencia justa y abierta, basada en el mérito.
  • Los nombramientos no deben basarse en consideraciones políticas personales o partidistas.
  • Los parlamentarios y/o el personal político solo deben participar en la contratación y promoción profesional del personal parlamentario en circunstancias excepcionales, generalmente en relación con los puestos más altos.
  • El reclutamiento debe llevarse a cabo con el objetivo de garantizar, en la medida de lo posible, que el personal parlamentario como cuerpo represente a la variedad de personas que son ciudadanos del país.

Las políticas claras rigen los procedimientos disciplinarios, la conducta ética, las horas de trabajo y las asignaciones de licencias para el personal parlamentario. La implementación de estas políticas es revisada periódicamente.
La administración parlamentaria tiene un marco de desarrollo profesional para el personal parlamentario.

 

Evalúe su parlamento en relación con esta dimensión

Criterios de evaluación

1: Políticas

Se establecen, implementan y revisan periódicamente políticas claras de recursos humanos para apoyar la gestión eficaz del personal parlamentario. Estas políticas rigen la contratación y retención del personal parlamentario, así como los procedimientos disciplinarios, la conducta ética, las horas de trabajo y la asignación de las licencias.

2: Procesos

Existen procesos para la planificación, la gestión del rendimiento y la presentación de informes. También existen descripciones de trabajo claras, junto con detalles de salarios, beneficios y otros incentivos de desempeño. Los recursos humanos son suficientes para apoyar todos los aspectos de los asuntos parlamentarios.

3: Contratación y promoción

Existen reglas y procedimientos determinados por el parlamento para la contratación y promoción del personal parlamentario. El personal parlamentario es contratado y promovido a través de concursos abiertos y justos, basados en el mérito, sin participación política.

4: Capacitación y especialización

La administración parlamentaria cuenta con un marco de desarrollo profesional para el personal parlamentario, que incluye capacitación y especialización en áreas específicas, y que reconoce las habilidades y capacidades únicas requeridas.

Cómo completar esta evaluación

Esta dimensión es evaluada en función de varios criterios, cada uno de los cuales debe evaluarse por separado. Para cada criterio, seleccione uno de los seis grados descriptivos (Inexistente, Rudimentario, Básico, Bueno, Muy bueno y Excelente) que mejor refleje la situación en su parlamento, y proporcione detalles de la evidencia en la que está basada esta evaluación. 

La evidencia para la evaluación de esta dimensión podría incluir lo siguiente:

  • Disposiciones del marco legal sobre la relación entre la administración pública y la parlamentaria
  • Disposiciones de la Constitución y/u otros aspectos del marco legal sobre la contratación independiente y el ascenso del personal parlamentario
  • Normas, procedimientos y directrices sobre la contratación y promoción del personal parlamentario
  • Estadísticas sobre la contratación y promoción del personal parlamentario
  • Revisiones o informes relacionados con los procesos de selección y promoción.
  • Políticas relativas a la gestión de los recursos humanos dentro de la administración parlamentaria
  • Contratos de desempeño, informes de trabajo realizado y evaluaciones de desempeño
  • Marco y trabajo de monitoreo y evaluación (si correspondiera)

Cuando corresponda, proporcione comentarios adicionales o ejemplos que respalden la evaluación.

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Obtenga ayuda con esta evaluación

La evaluación en relación con los Indicadores conlleva el diagnóstico y el examen de las fortalezas y las debilidades, por ejemplo, lo que el parlamento está haciendo bien y lo que podría hacer mejor o con más eficacia, teniendo en cuenta las buenas prácticas establecidas que se describen en los indicadores.

Lea la guía para la evaluación a fin de saber qué debe tenerse en cuenta a la hora de realizar una evaluación en función de los Indicadores. Descubra el modo de prepararse, la forma de establecer los objetivos de la evaluación y la manera de organizar el proceso, entre otras cuestiones. Contacte con los colaboradores del proyecto para obtener asesoramiento experto.

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